Callados De lo que los Hombres no Hablan, ¡Qué estímulo tan poderoso dio Pablo! Pero lo que tenemos en nosotros: fe, estabilidad, determinación, perseverancia, convicción y espíritu, el Señor nos renueva cada día para hacernos mejores hombres, esposos, padres, abuelos y representantes de Cristo.
En su nuevo libro Callados, mi querido amigo y antiguo pastor Johnny Hunt aborda esta idea de frente, utilizando el poder de la Palabra y sus propias experiencias vitales para aclarar algunas de las cuestiones difíciles y típicas con las que luchan los hombres.
Johnny habla directamente, sin juzgar, con su propia voz honesta y articulada sobre cosas que a menudo reprimimos o evitamos. Estos retos son reales y a menudo nos impiden realizar plenamente el plan de Dios.
Johnny no sólo aborda estas cuestiones y sus causas profundas, sino que también nos anima y nos enseña que hay un camino mejor y que Dios tiene una vía para que superemos cualquier desafío.
Nos necesitamos mutuamente. Como escribió Marcos acerca de Jesús, hemos de crecer en sabiduría, estatura y favor mutuo, ante Dios y ante los hombres. Pero la forma en que nos enfrentemos a ellos nos determinará. Gracias, Johnny, por compartir tu plan con nosotros en un lenguaje sencillo.
En el fondo de nuestros corazones, todos los seres humanos tenemos un fuerte deseo de ser la persona que Dios quiere que seamos. Al mismo tiempo, todos tenemos un lado oscuro, como la luna.
En el pasado, recibí innumerables correos electrónicos y cartas de esposas preocupadas por sus maridos. Esposas que sabían que sus maridos tenían problemas pero no podían hablar con nadie en silencio. Todavía puedo ver las notas.
Una esposa me escribió para decirme que apreciaba que animara a su marido a confesarle sus secretos más profundos. ¿Le dolía conocer semejante secreto? Por supuesto. Pero me atraía la sensibilidad y la franqueza de mi marido. Oro para que este libro te sirva de aliento en tu vida y te ayude a encontrar a alguien a quien puedas confiar con seguridad tus angustias.
Oro para que encuentres un pequeño grupo de hombres fieles que estén comprometidos entre sí y que puedan recurrir los unos a los otros cuando uno de ellos caiga. El Señor ya nos ha dado recursos poderosos que podemos usar para caminar en victoria.
Independientemente de nuestro pasado o circunstancias, cada uno de nosotros puede experimentar una vida de amor y obediencia que conduce a la paz y la alegría eternas. ¿No es esto un anhelo profundo dentro de ti? ¡Sé que lo es!